Permanezcan en mí, como yo permanezco en ustedes. Así como el sarmiento no puede dar fruto si no permanece en la vid, tampoco ustedes, si no permanecen en mí.
Permanezcan en mí, como yo permanezco en ustedes. Así como el sarmiento no puede dar fruto si no permanece en la vid, tampoco ustedes, si no permanecen en mí.
«La acción de gracias debe tener una parte muy importante en nuestra oración, la palabra «gracias» debe estar al inicio de todas nuestras oraciones, porque la bondad de Dios precede todos nuestros actos, envuelve todos los instantes de nuestra vida».
«Cuanto más se siente el deseo de dar mucho, tanto más a menudo se necesita recurrir al manantial que es Dios.»
«No busques ser grande e importante a los ojos de los hombres, sino a los ojos de Dios»
«No hay que hacerse ilusiones. Nadie puede ser excelente en las cosas grandes, si primero no lo es en las pequeñas».
«No hay mejores apostoles de los jovenes, que los mismos jovenes».