El Señor es mi Pastor, nada me faltará
El Señor es mi Pastor, nada me faltará
«12.En cuanto un hombre teme al Señor, él le enseña a escoger su camino.»
«La condición más esencial de toda actividad fecunda es la inmovilidad orante. El apostolado se hace ante todo hincado de hinojos.»
Mientras más nos hacemos pequeñitos por la virtud de la confianza, tanto más se abren el corazón y los brazos de Dios
Nos tocan mil penas y permanecemos alegres. Somos pobres y enriquecemos a muchos, no tenemos nada y lo poseemos todo.
El abandono es el fruto delicioso del amor.